"Adiós" no es "Para siempre"

Fue el 6 de noviembre de 2010 el día que el grupo alicantino Ego eligió para rendir homenaje y hacer una despedida digna al que durante mucho tiempo fuera su vocalista.

Conocí a Juan y a Patri a través de mi viejo amigo Paco. Y fue en aquella cena, en la que por entonces era su casa, versionando canciones de Héroes del Silencio con Paco a la guitarra, cuando descubrí la voz privilegiada de Juan y su habilidad para la música.

Inició su andadura muy pronto “En mi infancia tocaba la flauta en el colegio. Yo nunca estudiaba las notas de las canciones, simplemente memorizaba las melodías y las tocaba sin haberlas ensayado siquiera. Me enamoré de Europe, pero hasta los 15 o por ahí no empecé a soñar con ser un rockstar”. Con su aptitud musical, que le hizo superar la dificultad de ser zurdo a la hora de tocar la guitarra, Juan hizo sus pinitos en el mundo de la música aunque, a día de hoy,  ha decidido pasar a una nueva etapa en su vida.

Lejanos quedaron los comienzos y su sueño de ser un rockstar. Discos como “Get a grip” de Aerosmith, “kill´em all” de Metallica y “Appetite for destruction” de Guns n´roses fueron sus primeras influencias. Y Axl Rose y Jon Bon Jovi sus maestros de canto a distancia. “Cuando conseguí mi primera guitarra española y una hoja de acordes, saqué a oído casi todo el Unpplugged de Nirvana. Hice mis primeros conciertillos a guitarra y voz para mis vecinas del campo, quienes, a su vez, iban trayendo a más chiquillas y, al final, acababa yo muy bien acompañado.”

 

Quedamos a las siete de la tarde en Alicante para irnos al lugar donde se realizaría el concierto. Es sabido que los artistas y los genios son privilegiados en determinados aspectos  pero algo torpes en tareas más triviales, y... pude comprobarlo. Tardamos una media hora en encontrar el coche (sabía que estaba en alguna calle alrededor de la Plaza Pío XII)  Y, ya en éste, tremenda sorpresa me llevé cuando tras levantar la botella de batido de chocolate que se había volcado en el maletero y olerme las manos en busca del delicioso aroma a chocolate, me encontré con un olor totalmente distinto que me hizo soltar una carcajada. Un batido de elevada gradación y sabor amargo es bastante para ayudar a desinhibir al que, de por sí, da la sensación de ser un chico tímido y algo inseguro. Acababa de descubrír el milagroso “Chóleck” que ayuda a transformar a Juan en su alter ego: John K Devil.

“De adolescente y por mi cuenta, compuse una treintena de temas para cuando tuviera mi "soñado grupo perfecto" (antes estuve dando tumbos buscándolo sin mucho éxito) En mi sueño me comería el mundo entero y sería mundialmente famosísimo, pero como siempre he querido poder salir de casa e ir a donde quisiera andando y sin que me agobiasen, decidí que yo, a modo de Bruce Wayne tendría que encontrar a mi propio Batman. Y ¡chas! , surgió John K. Devil (JKD) quien debía aparecer para dar conciertos, maquilladísimo para que nadie supiera quién había detrás. Mis primeros conciertos los hice gracias a mi teclado. Amplié mi campo de gustos musicales que estaba estancado en el hard rock y en el heavy metal, a grupos del estilo de Depeche mode, Suede, U2, The cure. Esos conciertos estaban muy bien, aparte de que mi público me encantaba. Me maquillaba e incluso me llegué a poner vestidos de mujer. Vaya frikie, Patri es testigo, por entonces sólo éramos amigos.”

Saliendo de Alicante para dirigirnos a la sala donde tendría lugar el concierto y habiendo relajado ya parte de la tensión, pude ver a un Juan aparentemente relajado pero con un fondo triste. Cuesta creer que, tras muchos años en busca de un sueño al que se le ha dedicado tanto tiempo, y que, tras más de una treintena de conciertos desde que empezó a tocar con Náyade, Rain´s Embrace y Ego, hubiera tomado la decisión de abandonar definitivamente los escenarios.

Próximamente será padre, De hecho, Patricia no venía con nosotros por el avanzado estado de gestación en el que está.

Llegamos al lugar del evento, tarde, como las personas importantes y, como ocurre a las personas importantes, nadie reprochó nada. Andaban enfrascados en el montaje del equipo. Nos integramos en la tarea, aunque mi función fue más bien observar. He de decir que nunca había visto montar y desmontar una batería y que, no sólo siempre me pareció un instrumento difícil de tocar sino que ahora también difícil de mover de un lado para otro.  Juan parecía más tranquilo, quizás estar ya  junto a sus compañeros  ayudaba a que el artista, que estaba a punto de subir al escenario por última vez, empezase a sentirse despierto.

Pruebas de sonido de ambos grupos... Todo estuvo a punto rápidamente.

Juan forma parte de esta banda desde 2006 y es el cantante oficial desde aquel concurso que les acercó a la final tras el cual grabaron un disco.  Juan (voz), Pedro (guitarra), Míguel (bajo) y Bony (batería) son EGO . Respetada la decisión de Juan, quisieron hacerle una despedida digna homenajeándole con este último concierto. En las caras, la tristeza por el adiós pero también la belleza de la amistad y la gratitud por lo vivido.

Recuérdenme que la próxima vez que vaya a maquillar a un artista me lleve las gafas. Menos mal que la oscuridad del lugar no permitía ver mucho cómo le quedaron las uñas semipintadas de negro...

Tras ser teloneados por el grupo Limerick (antiguos componentes de La Mula) y con el lugar a rebosar, entre amigos, fans y seguidores que no quisieron perderse el evento, apareció en el escenario JKD y su banda. Con su bandana en el pelo -heredada de sus maestros Axl Rose y Jon Bon Jovi- y con las uñas y ojos pintados en honor a aquel adolescente que quería hacer conciertos sin que nadie supiera quién era, se encontró de nuevo sobre un escenario. A su lado, sus compañeros que, posiblemente a modo de homenaje, decidieron también maquillarse. Y así, entre aplausos, empezó a sonar EGO con “4000ºº” seguido de "Involución", el tema que los unió en su día.

Momentos emotivos fueron: la presentación, por parte de JKD, del resto de los miembros del grupo  a quienes llamó AMIGOS, además de compañeros; las palabras que dirigía a su futuro hij@, "hij@ mí@ no aprendas mucho de tu padre..." Y cosas tan graciosas como levantar “la botella mágica” y decir algo así como "éste es el secreto", lo que despertaba las carcajadas entre los asistentes.

 

Temas como “Alter ego”, “Perdido”, “Palabras” y “Cierra los ojos” hicieron vibrar la sala. La desgarrante voz de Juan formaba una armonía perfecta con la compacta música de sus acompañantes. A estas alturas de la noche,  JKD estaba al cien por cien en su hábitat. Saltaba, se tiraba por el suelo, invitaba al público y jugaba con él. No faltaron los divertidos intercambios entre el resto de componentes del grupo  y el cantante que despertaban las carcajadas de todos. Y, con “Prozac”, el público se fundió con él/ellos, aún más... si cabía.

Finalmente, Pedro consiguió callar, entre canciones, a un JKD que ya estaba totalmente desinhibido -entre la “bebida mágica” y la dosis de adrenalina secretada por la combinación rock´n roll/ disfrute/aplausos-. Y consiguió hacerle saltar las lágrimas cuando le dedicó (en nombre de todos)  el tema “Uno más”.

Para terminar, las versiones de Muse (New born) y Guns ´n roses (Paradise city) y uno de los momentos más emotivos de la noche. Juan dedicó el concierto entero a su mujer y a su futuro bebé e invitó a subir a Natalia para que cantase con él la canción “Viejos tiempos”, que acabó siendo entonada, al unísono, también por los demás miembros del grupo (abrazados) y el público.

Entre aplausos, Juan saltó del escenario, quizá sólo siendo consciente de que había completado otro concierto.

Creo que casi nadie, en esos momentos, podía creer la decisión de Juan, ni siquiera sus compañeros de banda.

John K Devil moría entre ovaciones como sucede con las personas que se despiden dignamente y dejan tras de sí una estela de buenos momentos.

¿Aparecerá un nuevo artista? ¿Se reinventará? No lo sabemos. De momento, le deseamos a Juan, a Patricia y a su hij@ que sean muy felices.

Ser padre requiere gran compromiso y responsabilidad, aunque aún no queda muy claro hasta qué punto eso lo exime de ser músico.  De momento, es lo que él necesita... dejarse espacio para lo que vendrá y acompañar a su amada Patricia en este camino que indudablemente cambiará la vida de ambos.

Náyade, Relative, Rain´s embrace y Ego estarán siempre en el recuerdo de Juan, de Patricia y de los miembros de estos grupos y amigos.

Juan considera que pudo acercarse mucho a cumplir sus sueños adolescentes -a parte de sus más de treinta conciertos- gracias a las actuaciones realizadas en el Paraninfo de la Universidad de Alicante sobre “Historia del Rock” con el aforo a rebosar.

“800 personas de público no está nada mal, pero a decir verdad ya tengo la cabeza suficientemente asentada como para pensar en que algún día JKD será un cantante que hará miles de conciertos alrededor del mundo. Aún así, JKD ha resurgido en cada uno de los conciertos multiplicando`por 1000 a cada persona de su público (para mi lo valen ;)) y Juan resucita cuando el choleck deja de tener su efecto.”

Continua diciendo “Ego ha significado para mí lo que puede ser una novia formal y son los únicos que me han dado un hijo, se llama "LEJOS DE AQUÍ". La música ha sido todo para mí durante muchos años. De hecho Patri siempre dice: "Juan, tú eres música." Mi proyecto en esta nueva etapa de mi vida es seguir mi camino marcial, como tú sabes, marcial filosóficamente hablando, Quiero que mi bebé sea soñador/a y especial como su papi. Quiero seguir sintiéndome joven y no aplatanarme como la mayoría de mis colegas papis y quiero ser bohemio y padre responsable a su vez. Buscar ese compromiso y demostrar que es posible."

Ojalá lo consigas Juan y, ya en ese compromiso, vuelvas a recuperar esa parte de ti que ahora aparcas.

Abrazos a ambos y también a Paco por haberme permitido conoceros.